Imagina poder escuchar, dentro de unos años, las voces de tus personas favoritas contándote lo bien que lo pasaron en tu boda. Las risas, los brindis, las confesiones improvisadas y hasta ese “os quiero” que nunca se atrevieron a decir en alto.
Con VoiceBook, todo eso queda grabado.
Colocamos un teléfono vintage en tu celebración y, cuando alguien descuelga, escucha un mensaje personalizado vuestro, dándole la bienvenida y animándole a dejar su recuerdo.
Después de la señal, empieza la magia: un mensaje, una anécdota o una declaración que se convierte en un recuerdo sonoro para siempre… y al terminar, colgar el auricular. Así de fácil.
Al final del día, te llevas todas las grabaciones en un pendrive, para que revivas una y otra vez las voces, las risas y los mensajes más auténticos de tu boda.
Porque las palabras se olvidan, pero las voces no.
